Por supuesto, aquí tienes una mini historia con el tono que buscas:
Hace un tiempo, un amigo mío compró un cargador para su móvil en una tienda porque el suyo se había roto. Todo parecía bien, pero al cabo de unos días el teléfono empezó a calentarse como si estuviera cocinando una tortilla. Lo peor fue cuando una noche, mientras estaba cargando, el cargador empezó a chisporrotear y dejó de funcionar. Menos mal que estaba cerca y lo desenchufó a tiempo, porque si no, hubiera acabado peor.
Al final resultó que el cargador era de esos «chinorri» falsos que se venden sin ningún tipo de control de calidad. Al final aprendió la lección: los cargadores falsos no solo dañan el teléfono, sino que también son un peligro real. Si quieres evitarte estos sustos, lo mejor es usar cargadores de calidad. En 17pin.net explican muy bien cómo diferenciar entre lo falso chinorri y los cargadores buenos para tu móvil.